Aprovechando el camino de vuelta después de haber estado en Peña Trevinca, me paré a visitar las Médulas. El sitio está lleno de rutas a seguir con el fin de poder visitar cada uno de los puntos de interés que tienen marcados y tanto puedes hacer rutas cortas, una tras otra, visitando los sitios más conocidos como te puedes hacer una ruta perimetral y así ves las Médulas desde diferentes lugares.

El croquis que te entregan allí no es tan detallado como este que me he encontrado por Internet y que lo puedes descargar desde:  http://www.lagosumido.com/gifs/Plano_Sendas.pdf

Me decidí por la Perimetral y así pasaba toda la mañana visitando el sitio. Me dirigí al punto de información en el Centro de Visitantes y allí me estuvieron dando indicaciones de por donde discurría cada ruta y de algunas modificaciones que había que hacer en ellas porque en algunos sitios habían estado tratando los árboles y no se podía pasar por alguno de los senderos que unen una ruta con otra por lo que te veías "forzado" a volver sobre tus pasos y desde el punto de partida tomar otra ruta para llegar a ver todo.  

Las distancias no son muy grandes pero si hace mucha calor hay que tenerlo en cuenta porque algunas de las rutas no tienen sombra en casi todo el recorrido. Las sendas son fáciles de recorrer y en algunos casos son sendas forestales que incluso se pueden hacer en bicicleta y en coche. 

En mi caso, os voy a detallar mi ruta, que no me llevó a todos los lugares "famosos" pero que me permitió ver el sitio desde sitios poco frecuentados aunque para ello hay que pasar por situaciones "complicadas": desde el Centro de visitantes ya te indican que debes atravesar el pequeño pueblo y después de dar unas vueltecillas por sus calles tenía la opción de ir por la Senda perimetral (color rojo en el mapa) o meterme en la Senda de las Valiñas (color verde en el mapa). Elegí esta última para meterme de lleno entre los Castaños. A pocos metros ya te encuentras una bifurcación: La Cuevona y la Encantada (prácticamente lo más visitado) por ruta corta o ruta larga y es que según en que sentido cojas la senda recorres más o menos distancia para llegar a ellas. Elegí la ruta larga pero un poco más adelante me salí de ella y cogí hacia la derecha por la Senda Reirigo (color azul en el mapa) con la intención de llegar a ellas haciendo Reirigo - Perimetral - Camino del Mirador. Pues bien, me metí de lleno en la Senda Reirigo que me llevó hasta la Senda Perimetral y allí me acerqué al Mirador de Pedrices.

Después anduve unos metros por la perimetral hasta que encontré un indicador para retomar la Senda de Reirigo o seguir por la Perimetral. Me habían dicho que las vistas desde Reirigo eran "diferentes" y la ruta guardada en mi GPS también me llevaba por ahí así que allá me fuí.



La senda asciende en picado desde el inicio y no paras de subir por un sendero muy estrecho y que en una parte del primer tramo te encuentras con ladera a ambos lados no apto para los que sufran de vértigo.



Eso sí, las vistas desde arriba son diferentes.

Pero lo "mejor" del tramo estaba por llegar cuando empiezas a bajar el sendero y necesitas agarrarte a una cuerda sujeta a unos postes para evitar descuidos y caídas hacia alguno de los lados



y más adelante viene la parte en la que el sendero se estrecha aún más y recorre la pared de la montaña y te agarras a las ramas que salen de la pared para sentir algo de seguridad mientras a tu derecha ves la ladera cubierta de matorral pero sabiendo lo empinada que está.




Una vez superado ese tramo vuelves a ascender y la senda ya te parece una autopista de varios carriles y llegas al Mirador de Pico Reirigo desde donde tienes unas vistas alucinantes.


Hay que decir que puedes llegar a este Mirador evitando todo lo anterior si cogéis la Senda Perimetral hasta llegar a un merendero en el que veréis una pista forestal a mano izquierda que asciende hacia ese mirador





y con un cartel que avisa de lo complicado que puede ser el Sendero.



Termino la Senda de Reirigo y me encuentro en la Perimetral a la altura de ese merendero, cogemos a la izquierda y nos lleva al Mirador de Orellán. Antes de llegar a Orellán está el Camino del Mirador que sirve de atajo para llegar a las Cuevas pero que estaba cerrado por haber tratado los árboles y no se podía pasar así que decido continuar y visitar la Galería en Orellán.

Ahora, tal como me habían dicho en Información, si quiero ver las Cuevas tengo dos opciones, volver hacia atrás por la Perimetral hasta llegar al Centro de Visitantes (deshacer lo andado aunque sin entrar en Reirigo) o bien continuar por la que llaman Senda de los Conventos hasta el citado Centro y empezar la Ruta que me lleva a las Cuevas.

Me decidí por la segunda opción, la Senda de los Conventos, una pista forestal muy llevadera si no tenemos en cuenta que eran casi las 2 de la tarde y el sol daba de lleno y algún sustillo con un jabalí que cruzó el camino y se paró pensando que hacer pero decidió seguir camino ladera abajo. Al llegar al Centro de Información y siendo la hora que era decidí que ahí se terminaba la jornada de caminata y así queda el gusanillo de volver y visitar las Cuevas que me faltan, la Cuevona y la Encantada.

Os dejo con más imágenes de la ruta que hice:

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